martes, 6 de abril de 2010

La creación de la Gran Vía de Madrid, de finales del siglo XIX a 1931 Madrid La creación de la Gran Vía de Madrid, de finales del siglo XIX a 1931

Vista del primer tramo de la Gran Vía de Madrid (Calle de Alcalá /  Red de San Luis)

La Gran Vía, una de las principales arterias madrileñas, se extiende casi de este a oeste desde la calle de Alcalá hasta la Plaza de España con sus 25 metros de ancho y sus más de 2,5 kilómetros de largo y estaba concebida para unir los nacientes y prósperos barrios de Salamanca y Argüelles.

Aunque la Gran Vía se empezó a construir en 1910, con los primeros derribos de edificios, el proyecto data de 1862 y no se concluyó hasta 1931, casi 70 años después.

La primera denominación, en el proyecto de 1862, era “Prolongación de la Calle Preciados y su enlace con Alcalá”, ya que se basaba en esa prolongación para la cual se habían adquirido ya entre 31 y 35 solares. Sin embargo, ese proyecto nunca se llegó a realizar.

Más de 20 años después, cerca de 1886, se consideró la posibilidad de trazar una 'Gran Vía' que tuviese su punto de partida en la calle de Alcalá frente a la iglesia de San José y que terminará en la plaza de San Marcial, actual plaza de España. El proyecto fue presentado por el arquitecto Carlos Velasco y su magnitud inspiró la popular zarzuela de ambiente madrileño 'Gran Vía' con libreto de Felipe Pérez y González y música de Federico Chueca.

Sin embargo, todavía habrían de pasar más de 10 años para conseguir algún avance. Esta dilación fue debida a la imposibilidad de expropiar todos los solares y casas que era necesario derribar. Pero con la 'Ley para Saneamiento, Reforma y Ensanche Interior' de las grandes poblaciones de 18 de marzo de 1895 se pudo seguir adelante. En 1898, la viuda de Velasco entregó el proyecto a los arquitectos municipales José López Salaberry y Francisco Octavio Palacios que aprobaron el proyecto definitivo en 1901.

El proyecto de la Gran Vía, según los arquitectos municipales, se justificaba entre otras razones por las siguientes:

Descongestionar la Puerta del Sol, centro neurálgico de la Villa y paso obligado por la disposición radial del viario.

Restablecer la comunicación entre los prósperos barrios de Argüelles y Salamanca a través del Centro.

Hacer desaparecer calles y casas insalubres, lóbregas y antihigiénicas.

Enlazar las estaciones de ferrocarril de Príncipe Pío y Atocha, acortando considerablemente las distancias.

Mejorar la circulación excesiva (¡a principios del siglo XX!) por los sitios más céntricos.

El proyecto fue aprobado definitivamente por Real Orden de 21 de agosto de 1904 y las tareas a realizar incluían:

Demolición de 312 casas; nivelación de 44 solares; desenlosar 8.856 metros de aceras; deshacer 26.365 metros cuadrados de empedrado y adoquinado; quitar 14.335 metros lineales de cañerías de agua y de gas, y 274 farolas; transporte y nivelación de .61.799 metros cúbicos de escombros y 31.997 de terraplén; enlosamiento de 18.777 metros cuadrados de acera; adoquinar con granito, un total de 35.616 metros cuadrados; asfaltar 11.373 metros cuadrados de calle; alcantarillar 2.502 metros; canalizar 1.315 metros lineales para las aguas, el gas y la electricidad; colocar más de 1.316 metros de tuberías para conducir el agua; disponer de 7.024 metros lineales de tubo de plomo; organizar cerca de 174 sumideros de incendios y tomas de aguas; distribuir 219 farolas de gas y 66 lámparas de arco voltaico (eléctricas) con sus candelabros.

Todavía hay que esperar más de cinco años, hasta que en noviembre de 1909 se adjudican las obras al banquero francés Martin Albert Silver. En 1910, por la parte de la calle de Alcalá, dan comienzo las obras de la llamada 'Avenida B', pues se proyectó la Gran Vía como la unión de tres grandes avenidas: la 'Avenida B' o calle del Conde de Peñalver, desde la calle de Alcalá hasta la de Montera; el 'Bulevar' o calle de Pi i Margall, desde la calle de Montera hasta la plaza del Callao; la 'Avenida A' o calle de Eduardo Dato, desde la actual plaza del Callao hasta la moderna plaza de España.

Las obras que, como hemos dichos, comenzaron en 1910, no terminaron hasta 1931 y la Gran Vía, para ese entonces, ya se había convertido en símbolo de Madrid. Convertida desde aquellos 'locos años veinte' en zona de ocio y de negocio, donde abundaban los más modernos cines, teatros, hoteles, restaurantes y salas de fiestas. El escritor norteamericano Ernest Hemingway decía que la Gran Vía era una mezcla entre Broadway y la Quinta Avenida.

Y así era, pues Estados Unidos estuvo siempre como modelo de estos nuevos establecimientos; principalmente de los primeros bares americanos de España que se distinguieron por su glamour y la presentación de las novedades en las consumiciones, como los cócteles de Perico Chicote, y en los espectáculos musicales caracterizados por los ritmos de moda en América del Norte y la Europa cosmopolita, como el jazz, el fox-trot, y más adelante el charlestón.


FDO: VERONICA

2 comentarios:

  1. ME ENCANTA EL EDIFICIO QUE ESTA JUSTAMENTE ENTRE GRAN VIA Y LA CALLE ALCALA DONDE ESTA LA RELOJERIA GRASSY

    FDO: VERONICA

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  2. LA CALLE GRAN VIA ES MUY PERO QUE MUY HISTORICA
    TIENE MUCHA HISTORIA QUE CONTAR TODAVIA

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